Gema es Técnico Superior en Anatomía Patológica y ha conseguido aprobar su oposición. Tomó la decisión de presentarse en varias Comunidades para aumentar sus probabilidades de éxito. Con el Método Formantia ha conseguido la constancia y flexibilidad que estaba buscando.
La importancia de la constancia
Gema se ha presentado en dos Comunidades para la misma oposición, en Castilla la Mancha y en Extremadura. Ella es Técnico Superior en Anatomía Patológica y, tras llevar un año escaso con nosotros, ha conseguido aprobar, algo imposible hasta la fecha.
Para ella la clave ha sido la constancia, porque el devenir diario fácilmente se lleva el tiempo por delante y con él, esas horas de estudio necesarias para sacar adelante una oposición, se pierden.
Una herramienta fundamental para poner orden en su método de estudio ha resultado ser nuestro Cronograma, como ella dice, “te obliga a estudiar”, marca una pauta lógica y sencilla. Junto con el apoyo de la Tutoría, Gema descubrió como optimizar su esfuerzo, entendiendo los puntos clave de un temario que, a priori, resulta inescrutable.
Aprendió a encontrar tiempo en momentos antes perdidos, de camino al trabajo un audio le hacía compañía mientras reforzaba sus conocimientos.
En la tranquilidad de la noche, ella podía ver en diferido sus clases, las veces que sintiera necesario, hasta conseguir que el tema formara parte de su memoria.
Entendió que su móvil podía transformarse en una herramienta más, usando nuestra aplicación en cualquier momento del día. Tal vez un test, tal vez un audio. Porque todo refuerzo es un paso más hacia ese ansiado aprobado.
Reforzar conocimientos, pero también confianza. Cada Simulacro, sobre todo presencial, es una escenificación de lo que va a suceder el día del examen, no solo a nivel conocimientos, tu concentración, tu nivel de nerviosismo, serán puestos a prueba. Gema nos lo retrata muy bien, “me los tomaba como si fuera el día del examen”.
Porque, como ella ha podido comprobar, siendo además de trabajadora, madre de una niña pequeña, vivir y opositar es posible, cuando dispones de un método creado con la flexibilidad necesaria para adaptarse a tus necesidades, enseñándote a focalizar tu atención en lo verdaderamente importante.