Laura ha conseguido plaza comoTCAE a pesar de llevar poco tiempo trabajado, lo que demuestra la importancia de la nota del examen, la importancia de un buen método de estudio.
“Esta pregunta la he hecho ayer”
Con esta frase rotunda Laura habla de lo que experimentó delante de su examen, mientras leía las preguntas se daba perfecta cuenta de que sabía la gran mayoría de las respuestas. No era una suposición, era una certeza.
Y esa clase de certeza es lo más tranquilizador que puede vivir una opositora. La pregunta nace sola, ¿cómo se consigue esa seguridad? Y la respuesta es una suma de factores que Laura explica estupendamente y que se resumen en dos: esfuerzo de la opositora y método de la academia.
A la hora de buscar un método, para Laura lo más importante era el tiempo y, por añadidura, el lugar. La idea de estar sometida al imperativo de un horario rígido de clases presenciales se alejaba por completo de su ritmo natural de vida. Estudiar así habría resultado imposible.
Necesitaba un método que se adaptase a sus tiempos al completo. Y, algo de máxima relevancia, a su propia forma de estudiar. Para ella, poder acceder al contenido, como un tutorial, el número de veces que fuera necesario, le proporcionaba tranquilidad y resultó vital a la hora de reforzar conocimientos.
Un método online que conseguía que Laura sintiera, en sus propias palabras: “que formo parte de algo”, al referirse al contacto constante con su tutora, una alianza perfecta entre motivación y ánimo, o con sus compañeros en el foro, dónde las dudas se tornaban comunes, como las ganas de lograr la ansiada meta.
Laura tenía un sueño claro y había encontrado su método online perfecto, ahora tocaba el turno de ponerse en marcha. Y para lograr quilómetros optó por presentarse en varias Comunidades, sin demasiadas pretensiones y, para su sorpresa, se encontró con el aprobado en todas ellas. Lo estaba haciendo bien.
Esta tenaz mujer tenía claro, desde que obtuvo su título, que su camino profesional nacía en la oposición y apenas un año después ya se estaba preparando. Sin esperar a acumular experiencia, sin esperar a enfriar su hábito de estudio. Sin excusas. Cuando tienes claro tu futuro, el camino para llegar a él se dibuja solo.